Escribir siempre ha sido una de mis pocas pasiones. Ensayo con la vida mientras escribo un libro, un compendio de folios desordenados y sucios guardados de cualquier manera en algún que otro cajón y que algún día pienso publicar. A menudo la duda se apodera de mi mente y me pregunto por qué escribo, para quién, si tiene sentido plasmar tanto sentimiento en papeles que de repente arrugo y tiro a la papelera... Hay momentos en que tengo la certeza de perder el tiempo escribiendo y filosofando de cosas que no entiendo ni entenderé jamás. Qué más da. Haimak

martes, 10 de abril de 2012

Rompiendo tus esquemas

Salvo  Caperucita  y  el  lobo...
Quién  sabe  lo  que  pasó??